La noticia de la muerte de la cantante británica Amy Winehouse sorprendió a sus admiradores, a sus familiares y a sus amigos, dentro de los cuales uno de los más afectados fue el actor Russell Brand, quien publicó una carta en su blog, en donde se refiere a la intérprete de Valerie como "una maldita genio", y una "hermosa y talentosa mujer" llevada por la adicción.
Brand, ahora casado con la cantante Katy Perry, conoció a Winehouse antes que publicara su álbum más exitoso, Black to black. El actor y comediante venía saliendo de un centro de rehabilitación, donde superó sus propias adicciones, y se encontró con una joven mujer que se definía como cantante de jazz. "Debe ser algún tipo de excéntrica", pensó Brand. "Pero luego se volvió masivamente famosa, y yo estaba complaxido de ver que la reconocía, pero aún más sorprendido porque no había experimentado su trabajo, y no estábamos en la década de 1950, por lo que me preguntaba como una cantante de jazz había alcanzado tanta importancia cultural".
"Ahora, Amy Winehouse está muerta, al igual que muchos otros, cuyas innecesarias muertes han sido romantizadas en retrospectiva, a los 27 años", escribe Brand. Y agrega que "hemos perdido a una mujer hermosa y talentosa por esta enfermedad. No todos los adictos tienen el increíble talento de Amy. O el de Kurt, Jumi o Janis". "Todo lo que podemos hacer es adaptar la forma en la que miramos esta condición, no como un crimen o una aflicción romántica, pero como una enfermedad que matará" concluye el actor.
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